La Ciudad se suma al Día Internacional de los Museos con propuestas para todas las edades

El sábado 17 de mayo, los museos de la Ciudad de Buenos Aires abrirán sus puertas con entrada gratuita y una agenda repleta de propuestas culturales para celebrar el Día Internacional de los Museos.

Aunque la efeméride se conmemora oficialmente el 18, este año las actividades se adelantan un día debido a las elecciones legislativas porteñas, pero la fiesta del arte y la memoria no se detiene.

Queremos que los museos sean espacios vivos, dinámicos, donde las comunidades encuentren un lugar para pensarse y proyectarse”, expresó Mariana Marchesi, directora general de Patrimonio, Museos y Casco Histórico del Ministerio de Cultura de la Ciudad.

El Día Internacional de los Museos, instituido en 1977 por el Consejo Internacional de Museos (ICOM), busca año tras año destacar el papel de estas instituciones en el desarrollo cultural y social de las comunidades.

En 2025, el lema elegido es “El futuro de los museos en comunidades en constante cambio”, una consigna que pone en foco los desafíos que enfrentan estos espacios en un mundo atravesado por transformaciones tecnológicas, tensiones políticas y profundas mutaciones sociales.

En Buenos Aires, la Red de Museos del Gobierno de la Ciudad preparó una jornada especial para el sábado 17 de mayo, con propuestas pensadas para públicos diversos: visitas guiadas, talleres participativos, recorridos temáticos y exposiciones de alta calidad, todo con entrada libre y gratuita.

Esta adaptación de calendario obedece a que el domingo 18 —día original de la conmemoración— se celebran las elecciones legislativas en el ámbito porteño, por lo que los museos permanecerán cerrados.

Desde el tradicional Museo Sívori, enclavado en los bosques de Palermo, hasta el entrañable Museo Histórico Cornelio de Saavedra, en el extremo norte de la ciudad, la oferta es variada y abarca todo el espectro del patrimonio artístico porteño.

A las 14 horas del sábado, en el Sívori, se realizará una actividad que combina recorrido guiado con taller artístico, bajo la propuesta “Sábados creativos”, ideal para disfrutar en familia. Más tarde, a las 17, tendrá lugar una visita guiada para público general.

El Museo de Arte Popular José Hernández, por su parte, presenta la imperdible muestra “Platería argentina, una pasión. Un siglo de coleccionismo”, que reúne piezas seleccionadas de las colecciones de Carlos Daws y Oscar Collazo, referentes indiscutidos del coleccionismo local.

Las obras permiten rastrear la evolución de la platería desde el período colonial hasta expresiones contemporáneas.

El Larreta, en Belgrano, se luce con dos exposiciones simultáneas: “Nicolás Rodríguez y la colección de azulejos del Museo Larreta”, donde el patrimonio histórico dialoga con obras contemporáneas, y “Intervenciones mínimas IV”, con intervenciones de artistas visuales actuales que interpelan y resignifican el acervo del museo.

Otra parada obligatoria será el Museo de Esculturas Luis Perlotti, en Caballito, que abre sus salas a “Luba Lisenberg. Encuentro entre dos dimensiones”, una propuesta que desafía los límites entre escultura, pintura y collage. Lisenberg, que inició su carrera como psicóloga, ha sabido integrar saberes diversos en una producción plástica rica en capas, texturas y simbolismos.

En diálogo con la actualidad y las nuevas narrativas, el Museo Sívori también ofrece “La lucidez geométrica”, un recorrido por grabados, pinturas y monocopias de Alicia Orlandi, que invita a repensar la geometría como lenguaje sensible.

Y a pocos metros, la muestra colectiva “El aire vacilaba a su alrededor” despliega un diálogo regional entre artistas de América Latina que exploran la interconexión del mundo desde enfoques ecológicos, afectivos y políticos.

Las visitas guiadas se sucederán a lo largo de toda la jornada, en espacios como el Palacio Noel (sede del Museo Fernández Blanco), el Museo del Cine, la Casa Fernández Blanco y el Museo Larreta.

Estas actividades no solo brindan acceso al conocimiento histórico y artístico, sino que generan un espacio para el encuentro y el intercambio entre vecinos, turistas y trabajadores de la cultura.

La propuesta museística de Buenos Aires se destaca también por su política de accesibilidad. Los miércoles, la entrada es gratuita para todo público.

Además, jubilados, estudiantes universitarios acreditados, personas con discapacidad (y un acompañante), menores de 12 años y grupos escolares de escuelas públicas pueden ingresar sin costo durante todo el año.

El resto de los días, la entrada general cuesta $1500 para residentes y $7500 para extranjeros no residentes, con excepciones como el Museo Sívori, que posee una tarifa diferenciada.

A contramano de quienes ven a los museos como instituciones ancladas en el pasado, las actividades de este sábado proponen resignificarlos como territorios en disputa, donde se actualizan las memorias colectivas y se proyectan futuros posibles. Ya no son templos silenciosos, sino laboratorios de ciudadanía, inclusión y creatividad.

Como periodista y vecino de esta ciudad, me resulta imposible no entusiasmarme con esta celebración que pone en valor no solo a los museos como contenedores de historia, sino como plataformas de transformación social.

Acompañar estas propuestas, caminar por sus salas, escuchar a los guías, dejarse interpelar por una obra, es también una forma de construir comunidad. Y en un mundo que cambia a un ritmo vertiginoso, necesitamos más que nunca espacios para detenernos, pensar y volver a empezar.

Este 17 de mayo, los museos de Buenos Aires no solo abrirán sus puertas, abrirán también conversaciones, miradas, preguntas. Y quizás, en ese gesto silencioso de mirar una obra o de escuchar una historia, encontremos nuevas formas de habitar el presente.