Clausuran local que vendía carnes “exóticas”
2 minutos de lectura
Yacaré, jabalí, llama, ciervo. La granja, ubicada en la zona del Abasto, ofrecía todo tipo de carnes exóticas. Pero después de un allanamiento, la Fiscalía de la Ciudad clausuró el local: determinaron que los productos no estaban aptos para el consumo y, además, no se pudo determinar su origen. La sospecha es que podrían provenir de la caza ilegal.
Carnes no convencionales”. Así se promociona la granja de “Delicateses”, como reza en su frente. Venden desde caracoles hasta “llama de la Puna jujeña”, pasando por “bifecitos de ñandú”, faisán, ciervo patagónico, conejo y jabalí. Todas especies muy buscadas por algunos chefs y que cotizan a precios elevados.
El fiscal aclaró: “Si bien no está prohibida la comercialización de estas carnes exóticas, se necesita documentación que avale que provienen de animales especialmente criados con ese destino”.
El problema fue, justamente, que el local no tenía la documentación para demostrar de donde provenía la carne que ofrecía. Y está prohibido comercializar carne de animales silvestres.
Al no disponer de documentación que comprobara el origen, y tras el examen bromatológico de rigor, se comprobó que el total de la mercadería decomisada no estaba en condiciones para el consumo. Por lo que se procedió a su destrucción”, contaron en la Fiscalía.
Los responsables del comercio fueron imputados por violación del artículo 79 del Código Contravencional de la Ciudad, que pena a quienes ejercen ilegítimamente una actividad con hasta diez días de prisión en la Cárcel de Contraventores del barrio de Pompeya.